algo inesperado.

No es fácil confiar en alguien después de que te hayan roto el corazón. Los sentimientos crean una coraza que consigue que nadie sepa lo que se traen entre manos y, poco a poco, te van comiendo por dentro e invaden tu cuerpo hasta llegar al punto en el que solo eres una batalla de secretos luchando por salir, por ser gritados a toda voz y poder ser entendidos por la única persona en el mundo que puede hacerlo. Todo esto te obliga a proponerte unos “requisitos” que impedirán que tus secretos más íntimos vuelen a los cuatro vientos sin dirección ni sentido. Piensas que esa persona tiene que hacerte sentir única, tiene que hacer que el mundo desaparezca cuando estáis juntos… esa persona tiene que hacerte sentir especial cada día, cada hora, cada minuto. Porque en realidad no necesitamos ranas que al besarlas se conviertan en príncipes, necesitamos ranas que al besarlas nos hagan ser princesas. Volver a sentir la ilusión, la seguridad, el cariño… Porque a veces un solo segundo basta para darte cuenta de que la persona que llevas años buscando la tienes delante y, quizás en otro segundo, te haga perderla para siempre.

dreamer-

¿Recuerdas aquellos años cuando de pequeña solían contarte cuentos, cuentos de princesas y príncipes, con finales felices, seres mágicos, dragones y brujas..? ¿Los recuerdas? Parecían reales, el mundo exterior parecía estar rodeado de sueños, historias bonitas y amores perfectos… ¿verdad? ¿Qué pasó desde entonces..? Creciste, te hiciste mayor y te olvidaste de los cuentos que te contábamos cuando eras pequeña. Te adentraste en un mundo que nada tenia que ver con aquellas historias, aquellos viejos relatos, aquellos mágicos momentos….Pero ¿sabes qué? Los cuentos de hadas son bien ciertos, pero no porque nos digan que los dragones existen, sino porque nos dicen que podemos vencerlos.

nothing last forever,

Es raro como cambiamos, cuando las personas mas importantes en nuestra vida nos abandonan, nos fallan...y nuestra vida cambia por completo. He aprendido que nada es para siempre, y que volver a confíar en alguien cuesta mucho. Pero las personas vienen y van. Como los trenes. Cuesta pensar que algún día tendrás a alguien que nunca te abandonará. Yo espero ese día. Para poder decir "Eres tú quién tanto esperaba encontrar". Ese amigo de verdad que te ayude a superar y que no se interese por si mismo. Que se interese por tu bien, y por lo bien que estás a su lado. Esa persona que te haga reír cuándo más triste estés. Esa persona que confíe tanto en ti, como tú confías en él. Y mientras tanto yo sigo esperando mi tren.

I do not know to tell you.

He intentado escribirte algo, pero ha sido imposible, a veces el vocabulario tiene deficiencias, huecos imposibles de llenar. Es increible, tantas palabras y hay cosas que no se pueden explicar. Todo me suena a lo mismo, blablabla. Espejos, silencios, razones que se quedan colgando como siempre. En estos momentos suelo buscar una canción que recubra cada parte de mi cerebro, quizás para no dar importancia a lo que digo, darle otro registro a mi voz o para envolverme de algo que no me deje escuchar mis pensamientos. Pero en medio de todo esto, de nuevo el corazón se llena, mis ojos vibran y mis manos sienten la necesidad de hacer una melodía con las letras del teclado. Porque no puedo sólo escribirte, ni hablarte y las miradas no bastan. Nada es suficiente cuando me revuelves de esa manera el interior, cuando hay algo luminiscente que debe abrirse paso. Ya ves, son demasiados años y pocas cosas me llegan, pero entre ellas te encuentras. Aprendí a levantarme rápido y olvidé ponerme pomada en las cicatrices. Son 16 años que a veces me parecen siglos y otras segundos.. A los 13 ya tenía 90 y ahora estoy volviendo para atrás. Por eso, tengo que confesarte que a veces no quiero ni verme, no me soporto, me daría dos hostias y cambiaría esta cara tan expresiva que tengo, porque no miento, pero me gusta esconderme. Juego a esquivar ojos que ven, no me gusta la vulnerabilidad y me tengo miedo. “Pobre niña tonta” me digo. Estoy tan marchita y viva a la vez que a veces no me soporto. Ahora no puedo decir un “si tu supieras..” porque ya lo sabes, porque ves mi yo en cada locura, en cada palabra. Pero soy un vaivén, a veces tardo en recuperar el equilibrio, siempre necesito más, soy insaciable. Absorbo mis sentimientos porque estas paredes se encierran demasiado, entonces el corazón se llena, mis ojos vibran y mis manos sienten la necesidad de escribir y no parar, porque llega un nuevo día, una nueva oportunidad de todo.

I wonder what you think when you see me.

Que mis pies se frenan al verte, quizás los nervios, quizás que no soy fuerte.
Y es que quiero tenerte no solo un día sino siempre, que no podría besarte y después olvidarte, que nuestro amor fuera como las olas que vienen se van y vuelta a empezar.

Vive rápido, muere joven.

Repítele 1000 veces todo lo que lo quieres por mucho que se lo hayas dicho ya. Respira hondo. Ponte eufórica. Camina con la cabeza alta. Ríete extremadamente de todo. Emborráchate. Limpia tu habitación. Ama el chocolate. Deja que piensen que estás loca. Baila...de la forma que sea pero baila. Canta en la ducha. Desobedece. Rompe la dieta. Sácate fotos. Monta en bici. Repito...juega. Fúgate de clases. Aprueba. Escucha música hasta quedarte sordo. Hínchate a helado. Haz daño...no mucho, pero hazlo. Cáete de una silla. Practica tu deporte favorito. Ponle tilde a lo que te dé la gana. Di delante de tu novio lo bueno que está su mejor amigo. Recuerda canciones viejas. Echa miradas por la calle. Hazle esperar. Cae en sueños profundos. Apréndete una coreografía, o mejor...todas las que veas. Vuelve a casa a las 10 de la mañana. Ponte a ver Titanic. Baja a tu portal a verle. Cárgate un móvil o más de uno. Léete un libro entero. Viaja. Siente mariposas en el estómago. Llora. Vive igual que un hielo por la espalda, un beso detrás de la oreja, el sushi, un gol de tu equipo...o del contrario. Igual que morder una guindilla, besar labios desconocidos, un final inesperado, tu canción favorita, una hora de masajes...vive.

Eres tú.

Es sentir todo lo que nunca creí que pudiera llegar a sentir y, en realidad, no tener ni la más mínima idea de lo que siento. Es querer reír a cada momento, aunque no tenga ninguna excusa; con sólo saber que me daré la vuelta y tendré tu cara para poder darte un abrazo. Es querer pasar los días contigo, aunque no hagamos nada especial, solamente convirtamos los segundos juntos en únicos. Es echarte de menos justo desde el momento en el que me alejo. Es ver volar el tiempo cuando estamos juntos. Es respirar hondo. Es soñar. Es mirarte. Es gritar en silencio. Es un susurro. Es sentirte. Es quererte como a nada. Es reír hasta quedarme sin aire. Es llorar de alegría. Es ser tuya. Es sonreír sólo por una mirada. Es luz oscura. Es parar un momento, y darme cuenta de que eres lo más importante. Es no poder encontrarle explicación a todo lo que pasa por mi cabeza, pero en realidad que no me importe, porque tengo la certeza de que soy completamente feliz y solo se que es gracias a ti.